4 claves para no cometer errores al momento de delegar
La mayoría de las personas piensan que eso significa repartir las tareas, establecer plazos, decirles a los empleados que confías en ellos para hacer el trabajo y luego mantenerte fuera de su camino.
“El delegar es la orquestación del talento y el tiempo frente a las prioridades”, dice el asesor ejecutivo Jesse Sostrin, autor del libro ‘The Manager's Dilemma’. “Es realmente el arte de conocer lo que le importa a los demás y luego alinear tus prioridades con su compromiso”.
Las claves
I. Recuerda que es parte de tu trabajo...y la clave de tu éxito
Una gran razón por la que algunos gerentes no delegan lo suficiente es porque tienen miedo. Pueden preocuparse de no poder confiar en que otra persona haga algo tan bien o tan rápido como ellos lo harían.
II. Sé inteligente sobre cuáles tareas delegar
Si tienes dificultades para determinar qué tareas delegar, hazte tres preguntas, como recomienda Bill Thomas, director general de Centric Performance, empresa de consultoría de liderazgo y recursos humanos.
1. ¿Es esta tarea el mejor uso de mi tiempo, o podría dedicarse mejor haciendo otra cosa?
2. ¿Quién más podría manejar esto ahora si yo no estuviera disponible?
3. ¿Qué me impide delegar esto?
Thomas dice que, según su experiencia, más de la mitad de los gerentes pasan tiempo haciendo cosas que son parte de la descripción del puesto de sus subordinados.
III. Establecer expectativas claras desde el principio
Averigua cuál quieres que sea el resultado final con cada tarea. Luego comunica eso, clara y frecuentemente, a todos los involucrados.
“Que la gente sepa cómo se ve el éxito ”, explica Spears. “Di: 'Estas son mis cosas no negociables. Me preocupo profundamente por estas dos cosas'. Si te vuelves bueno haciendo eso, eliminas muchos problemas”.
También ayuda que las personas sepan el nivel de calidad que requiere una tarea determinada. Todo debe hacerse bien, por supuesto. Pero no todo tiene que ser perfecto si eso significa tiempo extra, mientras que algunas tareas requerirán el máximo cuidado, comenta.
IV. Revisa regularmente el progreso de tu equipo
Muchas veces puede delegarse un proyecto solo para que el gerente, a última hora, entre en pánico en sobre cómo va todo. Entonces toma el proyecto por sí mismo o simplemente controla todo de forma excesiva.
Los delegadores inteligentes nunca se ponen a sí mismos —ni a sus equipos— en esos apuros, explica Sostrin.
En cambio, realizan ensayos con su equipo en varias etapas . Se imaginan que el proyecto está terminado y discuten cualquier inquietud que tenga el equipo para poder decidir qué debe hacerse mucho antes de la fecha límite.
"Los buenos líderes se adelantan pronto a sus inseguridades. No esperan hasta el último momento. Prueban la presión en cada paso del camino", expone Sostrin.
Fuente:
https://www.estrategiaynegocios.net/empresasymanagement/1323154-330/4-claves-para-no-cometer-errores-al-momento-de-delegar